¿OTRA VEZ JEY USO?

 

Que se te lesione uno de tus top heels y, además, uno de los personajes por el que estén pasando bastantes de las historias que se estén desarrollando en ese momento en una Compañía de Wrestling, es una muy mala noticia.

Por esta misma tesitura esta pasando, en estos momentos, la propia WWE con la lesión de hombro de Seth Rollins; lesión que va a obligar al luchador a pasar por quirófano y cuyo tiempo estimado de baja aun no se conoce con exactitud (de hecho Rollins es, incluso, duda para el próximo Wrestlemania).

Rollins era el actual Campeón Mundial de los Pesos Pesados y, además, por su personaje no solo pasaba la storyline del stable The Vision, sino que el wrestler también era el sustento de muchas rivalidades encarnizadas e importantes dentro de la programación actual de la WWE, como las que viene protagonizando desde hace meses con CM Punk o Roman Reigns, entre otros.

Su baja por lesión obliga a cambiar muchos de los planes que tenía la Empresa ideados para las próximas semanas y meses, además de dejar vacante y sin dueño uno de los Campeonatos más importantes de la Compañía (el Título Mundial de los Pesos Pesados).

Para solventar este último asunto, WWE solo tenía que buscar a un wrestler que mereciera aspirar a dicho Título ya que, la semana anterior, CM Punk ya se había ganado el derecho a disputarle el Campeonato a Rollins; por lo que solo había que buscarle a Punk un rival/candidato para que disputaran el Título entre ambos.

Sea como fuere, la decisión no ha gustado a muchos fans cuando la WWE, de nuevo, se decantaba por Jey Uso tras hacerle ganar una Battle Royal para dirimir dicho segundo candidato al Título que se enfrente a CM Punk por dicho Campeonato. 

Sorprende que la decisión no haya recaido en LA Knight, como muchos esperaban y deseaban: el wrestler atraviesa por un buen momento de popularidad, es bastante solvente en el ring, es muy apoyado en todas sus peleas y, aun así, la WWE no acaba de decantarse por él en lo que respecta a la escena titular. 

La Empresa es plenamente consciente de esta situación pero, a pesar de ello y por alguna razón que se nos escapa, parece tener a Knight siempre "atascado" en las puertas de un Campeonato Mundial, pero sin acabar nunca de hacerle pasar a ese siguiente nivel.

En lugar de esta (o de otras) opciones, WWE se ha vuelto a decantar por Jey Uso... otra vez.

Y eso a pesar de que su relativamente reciente reinado como Campeón Mundial de los Pesos Pesados tuvo resultados, cuanto menos, discutibles (a nivel de funcionamiento comercial y de rendimiento en los combates durante ese reinado).

Es cierto que Jey Uso, como personaje televisivo, posee últimamente algo más de interés de cara a la audiencia respecto a hace unos meses, debido a que parece haber cambiado de actitud y da la sensación de estar coqueteando con un turn heel que no acaba de producirse del todo (si es que llega a producirse alguna vez). 

En un momento dado, el luchador optó por poner en práctica esta nueva actitud más egoista y más fria (mirando solo por sus intereses personales, caiga quien caiga) como forma que él considera más efectiva de intentar volver a recuperar el terreno perdido en el roster y regresar a la zona más top del mismo, zona de la que caía una vez perdió el Campeonato Mundial de los Pesos Pesados hace algunos meses... y esta nueva actitud le llevó, incluso, a traicionar a su propio hermano, eliminándolo de la Batalla Real del último Raw en la que se llevaba la victoria para ganarse así el puesto para disputarse con Punk el Campeonato del que hablamos (y eso que Jimmy, su hermano, previamente había ayudado a Jey en esa misma pelea, salvándole en un par de ocasiones de una eliminación que parecía segura. Su cabreo fue visible en todo momento tras todo lo ocurrido).

Sin embargo, y a pesar de que estos detalles en la nueva actitud de Jey Uso lo hacen, como decía antes, un personaje algo más interesante en televisión que en semanas y meses recientes, lo cierto es que casi nadie quería verle optando de nuevo a un Título Mundial.

Por todo ello, solo podemos conjeturar sobre cuales han podido ser las razones que han llevado a WWE a decidir repetir con Jey Uso en la órbita de un Título Mundial, colocándole por encima de otras opciones que, a priori, parecían mejores, además de venir avaladas por un mayor apoyo del respetable.

Se me ocurre que las ventas de merchandising han podido tener bastante peso a la hora de optar por esta decisión, porque es cierto que Jey Uso continúa siendo uno de los mayores top sellers de merchandising de la Compañía... pero a saber.

Veremos si la WWE cambia esta decisión con algún giro de guion a lo largo de las próximas semanas o si, podría ser también, acaba incorporando a algún otro wrestler más al combate por este Título, buscando así aplacar un poco el descontento de gran parte de los fans con esta decisión. 

DOMINIK MYSTERIO ES LA ANTÍTESIS DE SU PADRE



Si no llevara consigo el apellido "Mysterio", muchos ni siquiera llegarían a sospechar que Dominik Mysterio es, en realidad, hijo del legendario Rey Mysterio.

Y es que Dominik Mysterio es totalmente la antítesis de su propio padre:

- Rey es un luchador de físico "pequeño" (mide alrededor de 1.68cm) y Dominik es alto (mide 1.85cm)

- Rey Mysterio lleva máscara y Dominik no

- Rey Mysterio se centraba, sobre todo, en un estilo de wrestling high-flyer/volador y Dominik no tiene demasiados movimientos "voladores" en su arsenal, recurriendo mayormente a otros estilos de lucha.

- Rey Mysterio se ha caracterizado por ser babyface durante la mayor parte de su carrera (o, al menos, durante sus momentos más punteros) y Dominik, sin embargo, es heel (de hecho, en el kayfabe, odia a su padre)

... en definitiva, que Dominik no puede ser más diferente a su progenitor. Algo curioso, teniendo en cuenta que lo más habitual es que los wrestlers que vienen de familias que ya formaban parte del negocio anteriormente se parezcan un poco a sus predecesores y, más o menos, sigan el mismo legado. En este caso, sin embargo, ocurre todoalmente lo contrario

Y, ya que tocamos el tema, se trata de algo realmente meritorio en el fondo: conseguir forjar tu propio estilo y tu propio personaje a tu manera, bajo tus condiciones y bajo tus normas; aun viniendo de una familia o de unos wrestlers que han dejado huella dentro de la Industria (en lugar de limitarte a hacer lo mas sencillo, que hubiera sido seguir la misma senda que ellos te hubieran trazado).

En otro orden de cosas, y cambiando de tema, es de destacar la buena respuesta del público que suele conseguir Dominik Mysterio en sus apariciones, sobre todo teniendo en cuenta que se trata de un personaje villano que siempre suele recurrir a argucias y malas artes para sacar sus combates adelante.

En este sentido vuelve a recordarnos más al mítico Eddie Guerrero que a su propio padre, ua que el personaje de Eddie Guerrero actuaba de formas similares y, con todo y con eso, acabó granjeandose con el tiempo las simpatías y el apoyo del respetable.
Por cierto, si alguien tiene la curiosidad de saber a quien le estaba lanzando Dominik los insultos de este clip... decir que se estaba dirigiendo a Penta, el cual se encontraba sobre el cuadrilátero en ese momento :)

STEPHANIE VAQUER: ASCENSO METEÓRICO

Los que ya llevamos bastantes años siguiendo de cerca este apasionante mundo del Wrestling Profesional hemos asistido a todo tipo de carreras en lo que a luchadores se refiere: wrestlers que no han llegado a nada y han acabado quedándose por el camino, wrestlers que han tenido un momento de gran repercusión que, posteriormente, no han sabido mantener en el tiempo y han acabado cayendo en el olvido igualmente tras un fugaz momento de brillantez; wrestlers que han alcanzado el techo del negocio y han marcado su nombre con letras doradas en los anales de esta Industria para mantenerse ahí arriba durante años venideros… pero, sin duda alguna, los casos más raros y menos frecuentes son los de esos luchadores que han alcanzado la cima de una determinada Empresa en muy poco tiempo, protagonizando así ascensos meteóricos que se dan en muy pocas ocasiones dentro de un negocio que, por lo general, suele exigir al profesional una más o menos larga etapa de regularidad previa antes de catapultar definitivamente al estrellato definitivo a un luchador determinado.

Probablemente el último y más llamativo caso perteneciente a este último grupo que he enumerado anteriormente lo tenemos en la figura de Stephanie Vaquer.

La chilena, apodada como “La Primera” (porque, curiosamente, ha sido la primera luchadora en conseguir muchas cosas por primera vez (valga la redundancia) a lo largo de su trayectoria en las diferentes compañías en las que ha peleado), ha venido protagonizando en los últimos meses uno de los ascensos más meteóricos, rápidos y fulgurantes que se recuerdan dentro de la WWE.

Tras anunciarse su fichaje por WWE el 10 de Julio de 2024 como nueva luchadora que pasaría a engrosar las filas de NXT, la chilena no tardó demasiado en brillar y muy poco después, concretamente el 15 de Febrero de este 2025, Vaquer capturaba su primer Campeonato en la marca en forma de Título Femenino de Norteamérica siendo, además, la primera luchadora chilena y también la primera luchadora sudamericana en ostentar dicho Título (como vemos, el nick de “La Primera” persigue a esta mujer casi a donde quiera que vaya).

Por si esto fuera poco, no pasaba mucho tiempo más para que Vaquer lograra la hazaña de capturar también, y de forma simultánea, el Título Femenino de NXT; concretamente el 11 de marzo de ese mismo año (menos de un mes después de haber capturado el anterior Campeonato, aún en su haber) convirtiéndose así, de nuevo, en la primera doble Campeona de la historia de NXT, además de la primera Campeona chilena y sudamericana de la historia de la marca (de nuevo el sobrenombre de “La Primera” sigue persiguiendo a Vaquer a todas partes).

Tras estos aplastantes 10 meses de absoluto dominio en NXT su paso al main roster era, obviamente, inminente; y así acababa produciéndose el 30 de Mayo de 2025. 

Si bien este dato de ser ascendida al main roster tan pronto puede chocar a alguien, hay que aclarar que Vaquer ya llevaba tras de sí una dilatada carrera de 15 años como wrestler profesional (o tal vez tendríamos que decir 13; porque 2 de esos años, debido a una brutal lesión en forma de triple fractura nasal, los tuvo que pasar alejada del ejercicio de la Lucha Libre Profesional)… pero, sea como fuere, Vaquer solo tuvo que pasar un breve tiempo en el territorio de desarrollo de la WWE exclusivamente para pulir su estilo y adaptarlo a la forma en la que WWE desea que trabajen sus luchadores en el ring ya que, en lo que respecta a experiencia, la luchadora ya llegaba a la Empresa más que curtida tras década y media de trabajo y de haber pasado por Compañías como CMLL, NJPW, Stardom, Revolution ProWrestling o AEW, entre otras.

El meteórico ascenso de Vaquer no dio visos de perder continuidad en el main roster y, aunque no lograba la victoria en la pelea de escaleras por el Money in the Bank femenino en Junio que le habría otorgado una oportunidad Títular, igualmente la luchadora logró meter la cabeza en la órbita del Título Mundial Femenino ganando una Battle Royal entre 20 mujeres que le daba la oportunidad de disputarle dicho Campeonato a Naomi, su dueña en aquellos momentos.

Sin embargo, la pelea tuvo que cancelarse ya que Naomi se vio forzada a dejar vacante  el Título Mundial Femenino debido a su embarazo, que la iba a obligar a permanecer alejada de la acción una buena temporada.

La solución por la que optó WWE para manejar este Campeonato, una vez quedaba vacante por el embarazo de su ex-campeona, fue la de respetar a Vaquer como candidata al Título pero, ante la ausencia de Naomi, hacerla disputar dicho Título contra su dueña anterior a Naomi: una Iyo Sky a la que la chilena lograba doblegar el 20 de Septiembre de 2025 en una maravillosa pelea celebrada en el mediocre Wrestlepalooza (la pelea de estas luchadoras fue, de hecho, lo mejor de aquel show), convirtiéndose en la primera luchadora chilena y también en la primera luchadora sudamericana en ganar un Título Mundial en WWE (como estamos viendo, no la llaman “La Primera” por nada).

En este punto, y desde su llegada a WWE, habían pasado 14 meses. Stephanie Vaquer ya era Campeona Mundial de WWE, además de haber ganado el Título Femenino de NXT y el Título Norteamericano Femenino de esa misma marca de forma simultánea anteriormente.

Tremendo, ¿no?... pues eso no es todo: el 11 de Octubre de 2025, y con motivo de la celebración de Crown Jewel (PLE en el que los dos máximos Campeones de la WWE se enfrentan entre ellos para dirimir cual de ambos luchadores con sus respectivos Títulos se coloca por encima del otro; aunque a nivel jerárquico ambos Campeonatos, en teoría, ocupen el mismo nivel); Stephanie Vaquer (como Campeona Mundial de WWE) se enfrentaba a su homóloga Tiffany Stratton (como Campeona de la WWE), dejando como resultado a la chilena volviéndo a alzarse victoriosa, colocando su Título Mundial Femenino por encima del Título Femenino de la WWE y, por si esto fuera poco, endosándole a Stratton su primera derrota en 2025 ya que, hasta este momento, Tiffany no había perdido ni un solo un combate individual en todo lo que llevábamos de año y era, hasta justo ese momento, una de las Campeonas más sólidas dentro del roster de la WWE.

En poco más de un año, Vaquer se ha colocado en la cima femenina de la WWE en un tiempo absolutamente record protagonizando, como decía al principio de esta entrada, uno de los ascensos más meteóricos y fulgurantes que se recuerdan en la historia de esta empresa. Por reiterativo que pueda sonar, hay que volver a remarcar su nickname de "La Primera" porque, de nuevo, Stephanie Vaquer es la primera luchadora (o luchador) de la historia de la WWE en ganar 4 Títulos en su primer año dentro de la Compañía.

Es indudable que la WWE ha apostado fortísimo por esta luchadora y que su apoyo a la misma, además de ser bestial, no conoce demasiados precedentes en la historia reciente de esta Empresa; algo, además, que no obedece a razones caprichosas o aleatorias: sus combates, por lo general, han tenido un excelente nivel y su conexión con el público también ha sido francamente buena, lo que ha llevado a la WWE a decidir alzarla a lo más alto en un tiempo record incluso a pesar del importante handicap que todavía presenta la luchadora con el idioma, una asignatura pendiente que aún arrastra la luchadora en sus promos a la hora de manejar el inglés que, para cualquier otro wrestler, habría sido una barrera insalvable a la hora de que la Compañía apostara por él o por ella (handicap, por cierto, que esta en proceso de solucionarse a medida que la luchadora va ganando soltura semana a semana en televisión con el idioma de Shakespeare).

En este momento para Stephanie Vaquer, el límite es el cielo… y, a este ritmo, hasta el cielo parece empezar a quedársele pequeño a la chilena.

#FIRETRIPLEH Y LA POCA MEMORIA DE LA GENTE

Antes de empezar, quiero dejar clara una cosa: A Vince McMahon le debemos TODO lo que es el Pro Wrestling a día de hoy, así como hasta donde ha conseguido llegar este espectáculo a nivel mundial.

Vince tomó una forma de entretenimiento marginal que se desarrollaba frente a escaso público asistente, circos ambulantes y audiencias localistas hace un siglo y la moldeó hasta convertirla en el espectáculo mainstream a nivel mundial que ahora conocemos.

Cosas que hoy se dan por supuestas y que nos parecen tan elementales como que los luchadores salgan al ring con música, que sus entradas sean ya tan parte del espectáculo como las propias peleas, las formas de contar muchas de las historias que vemos en nuestras pantallas, el estilo de producción y de emitir el Wrestling en televisión que se lleva a cabo todavía en nuestros días, la creación de muchos de los personajes que se han acabado convirtiendo en iconos que han trascendido más allá de esta Industria y casi cualquiera de los elementos del espectáculo que hoy, como digo, damos por sentados, fueron ideados o convertidos en lo que son actualmente gracias a Vince McMahon.

Sin Vince McMahon no existiría la WWE. Probablemente, y como consecuencia, tampoco existirían otras empresas de Pro Wrestling cuyos promotores crecieron viendo WWE/WWF en sus casas cuando eran niños. Sin Vince McMahon no existiría este blog y, probablemente, el Wrestling en general, como tal, sería algo tan residual y tan marginal que cabe la posibilidad, incluso, de que hasta se hubiera extinguido por el camino antes de llegar a nuestro presente.

Si. Todo eso se lo debemos a Vince. Es de justicia decirlo a la hora de abordar esta entrada en particular y, como tal, queda ya expuesto sobre la mesa. 

No hace demasiados años, cuando contemplábamos a Vince McMahon como líder único y absoluto de la Compañía no solo en su vertiente más empresarial, sino también en la creativa llegando, incluso, a ser un personaje más dentro de las historias que se contaban en WWE, pocos pensábamos en qué términos iba a sobrevenir su abrupto final dentro de la Compañía.

Y es que, pensar en Vince no hace tantos años era pensar en una emotiva retirada por todo lo alto llegado el momento, un ingreso en el Hall of Fame de la Empresa con todos los honores y sentidos homenajes provenientes de todos los rincones de la Industria del Pro Wrestling…

… Nadie esperaba, por contra,  a un Vince McMahon prácticamente forzado a salir de WWE en silencio, con deshonor y por la puerta de atrás cuando emergían a la luz gravísimas acusaciones sobre acosos sexuales mantenidos en el tiempo, tratos vejatorios y comportamientos de dudosa ética y moral ejercidos por Vince, especialmente, contra una de las empleadas de la Compañía, la cual desataba todo este escándalo sin precedentes al llevar a los Tribunales a Vince McMahon en un proceso judicial que, mientras escribo estas líneas, continúa su desarrollo en los juzgados y está aún por dirimirse.

Sea como fuere, y con o sin escándalos y procesos judiciales de por medio, el sucesor natural de Vince en el cargo (especialmente en lo que respecta a la vertiente creativa) era Paul Levesque, más conocido como Triple H (o Hunter, para los amigos).

Como digo, su situación en la Compañía lo hacían ver como el lógico sucesor natural de Vince cuando este faltara (fuera o no su salida con escándalos judiciales de por medio): yerno de Vince, siempre cercano a la cúpula de la Compañía y a sus decisiones creativas por esta razón, atesorando una gran experiencia como ex-luchador profesional que le otorgaba muchas tablas para dichos menesteres y, sobre todo, habiendo ya demostrado talento para cargos directivos cuando, al mando de NXT como división de desarrollo, lograba en la denominada “Black & Gold Era” de dicha marca ser el producto de más calidad dentro de la WWE superando, incluso, la calidad de Raw y de Smackdown como shows principales de la Empresa durante aquellos años en los que NXT dependía totalmente de sus decisiones, una vez Vince delegaba totalmente en Hunter el control total de la división.

Con este panorama, llegábamos por fin a la sorpresiva, inesperada e impactante salida a marchas forzadas de la Compañía de un Vince sumido en los escándalos y en los procesos judiciales anteriormente expuestos, dejando así via libre a un Triple H que pasaba ahora a ocupar su lugar controlando el main roster de la Compañía como booker principal, pasando a dejar NXT en manos de un nuevo equipo creativo capitaneado por su amigo Shawn Michales desde ese momento.

Alcanzando ya momentos mucho más recientes a la fecha en la que escribo esta entrada llegamos ya al pasado año de 2024, el cual ni el hater más recalcitrante de Triple H puede negar que fue un año bastante bueno a nivel creativo dentro de WWE. Hunter se limitaba a aplicar en el main roster los mismos aciertos, buenas decisiones y bookeos a largo plazo con los que había hecho brillar a NXT en su “era dorada y negra”; Triple H no hacía más que “extender” en Raw y en Smackdown el buen estilo de trabajo que había demostrado ya sus frutos anteriormente en NXT y el producto de la Compañía ganaba así muchos enteros en relación a la calidad que habían demostrado los shows principales en la última etapa de Vince McMahon al mando.

De este modo llegamos al año que nos ocupa, 2025… y si: es totalmente innegable que el producto, en general, ha sufrido un descenso de calidad y de brillantez en estos 10 meses que llevamos de año en comparación al nivel al que consiguió rallar durante el pasado año de 2024: el desastroso turn heel de John Cena (impactante y genial en su comienzo, pero desastroso a posteriori por no lograr darle una continuidad acertada); shows aburridos (especialmente en lo que respecta a Smackdown), historias menos interesantes y menos inspiradas y, en definitiva, un producto que, si no desastroso, digamos que ha sido un producto que solo ha logrado brillar a ráfagas, básicamente por venir acompañado de mucho relleno poco inspirado; dando como fruto un producto, a nivel general, inferior a todas luces al del año anterior.

Con todo y con eso, es de justicia reseñar los esfuerzos que se han venido apreciando en las últimas semanas por parte de la Compañía para intentar retomar el rumbo en este sentido: en los shows de las últimas semanas (especialmente en Raw y en la mayoría de PLE), se ha notado claramente un afán por centrarse en la narrativa de las diferentes historias de una forma más notoria y relevante, lo que está ayudando a paliar en buena medida la sensación que han dejado muchos shows de los últimos meses en los espectadores de ser shows “en los que no pasaba nada”. Claramente aún es pronto para sacar conclusiones al respecto pero, de forma evidente, se aprecia un esfuerzo por mejorar estos aspecto en los últimos weeklys que, a su vez, han antecedido al excelente Crown Jewel, PLE que ha acabado cuajando como uno de los mejores shows (si no el mejor) que ha dado la Empresa en todo lo que llevamos de 2025. Como digo, son esfuerzos que se pueden apreciar fácilmente y que, por supuesto, se agradecen como fan y como espectador.

… Pero no está siendo suficiente: a pesar de todo, llama la atención de cierto sector de fans que lleva un tiempo expresando su cabreo con el producto actual de WWE y, concretamente, con Triple H como uno de los máximos responsables del mismo. Sin ir más lejos, hace muy poco llegaba a ser trending topic en redes sociales el hashtag #FireTripleH (#Despidan a TripleH), promovido y apoyado por determinados sectores de aficionados que, no solo piden la cabeza de Hunter como responsable creativo máximo actual de la Compañía, sino que llegan también, incluso, a clamar por el retorno de Vince McMahon para tales roles (si es que esto es de alguna forma posible dadas las actuales circunstancias entre WWE y el propio Vince que, por si fuera poco, cuenta ya con 80 castañas a sus espaldas).

Reconociendo y apoyando que la crítica es légitima y siempre positiva y necesaria, que el fan realmente hace bien en ser siempre exigente y en no mostrar nunca conformismo respecto a los shows y, por supuesto, respetando siempre todas las opiniones de los aficionados, he de expresar, sin embargo, lo mucho que me sorprende la poca memoria de la gente.

Solicitar la cabeza de Hunter en una bandeja de plata mientras que, al mismo tiempo, se clama por el regreso de Vince McMahon como booker principal de la Empresa me parece un ejercicio de amnesia selectiva que resulta, cuanto menos, absolutamente sorprendente.

Aquellos que claman por el regreso de Vince a los guiones de WWE parecen haber olvidado los últimos años de McMahon al frente del departamento creativo de la WWE: shows absolutamente abominables, un producto paupérrimo con el piloto automático puesto, sin riesgos, acomodado, aburrido, predecible, desprovisto de cualquier tipo de emoción y a un nivel inferior al punto más bajo de Triple H al cargo en cualquiera de los shows que esta bookeando actualmente. ¿Es que nadie lo recuerda?, ¿en serio?...

Voy a hacer una lista de los despropósitos de Vince durante los últimos años de su mandato (previos a la llegada de Triple H para ocupar su puesto), para ver si así ponemos las cosas en contexto y refrescamos un poco la memoria. Solo por citar algunas cosas que se me ocurren sobre la marcha (hay mucho más):

-          Shows infumables antes y durante la pandemia

-         Bookeo tozudo y lamentable en los primeros años de Roman Reigns que, perfectamente, podrían haber arruinado su carrera como Wrestler Profesional (afortunadamente no acabó siendo así)

-         Gran Khali bailando en el ring y protagonizando ridículos segmentos de Kiss Cam con el público asistente

-          Torito (luchador con acondroplasia) hasta en la sopa y como personaje principal en Raw

-          Jinder Mahal como Campeón de la WWE (había que expandir el negocio por India y hacer Campeón Mundial a un wrestler de allí, aunque fuera mediocre y vendiera 3 camisetas, les pareció una buena idea…)

-          La historia de la boda entre Rusev y Lana con infidelidad con Bobby Lashley de por medio (una novela turca en Raw)

-          Hornswoggle Campeón Crucero y último Campeón del historial de dicho Título (se extinguió poco después)

-          Santino Marella haciendo de mujer como Santina, sin que nadie sospechara que se trataba de la misma persona (aunque resultara evidente)

-          Todo el mundo bailaba todo el rato sin venir a cuento

-          Exagerado tono de comedia en casi cualquier cosa (Triple H tiene un tono y un estilo de bookeo que tiende a ser bastante más serio y más sobrio en general)

-          Se impidió a Undertaker retirarse invicto en Wrestlemania (racha que Brock Lesnar rompió de forma polémica, destrozando gran parte del aura y del misticismo que el personaje del Taker debería haber mantenido hasta su retiro)

-          Mal manejo de CM Punk que ocasionó su frustración con la Empresa y posterior salida de la misma en 2014 de malas maneras (la Administración de Triple H, por contra, logró repescar posteriormente a un activo tan valioso dentro de la Industria como es Punk)

-          Exceso de peleas que acababan en DQ, demostrando un bookeo perezoso y acomodaticio sin intenciones de “mojarse” casi nunca en general

¿De verdad esto es lo que queremos que vuelva?, ¿es que la gente ya no se acuerda de estas cosas cuando clama por un retorno de Vince McMahon?...

 La conclusión es clara: Aun con todo lo que ha significado Vince dentro de esta Empresa y dentro de esta Industria, sus últimos años al cargo del control creativo de WWE fueron un absoluto desastre a todos los niveles; siendo obvio que, incluso el momento más bajo que pueda pasar actualmente Triple H como booker, supera aun así con creces a esos últimos años de su suegro en comparación directa.

Los shows actuales de la WWE, aun siendo todo lo flojos que queramos, siguen estando por encima de los shows que Vince bookeó durante su último periodo en WWE.

De esta colina no me bajo.

La gente no es consciente de lo que pide y, de nuevo, me llama mucho la atención la amnesia selectiva que sufre el personal.

LECCIÓN DE STORYTELLING

 

2025 No esta siendo el mejor año de WWE a nivel creativo.

Sin embargo, en los últimos shows (especiamente en lo que concierne a Raw) se esta apreciando un esfuerzo notable por parte del Departamento Creativo de la Compañía a la hora de intentar reforzar la narrativa, beneficiando así a gran parte de las historias que se están desarrollando actualmente en la programación semanal de la WWE.

Un ejemplo de estos esfuerzos por intentar reforzar la calidad de las historias y sus formas de narrarlas lo tuvimos en la promo entre Seth Rollins y Paul Heyman llevada a cabo en el último Raw.

Como sabemos, Seth Rollins y Cody Rhodes se verán las caras en tan solo unos días en Crown Jewel, show donde protagonizarán un combate como sendos Campeones máximos actuales de la Compañía (Rollins como Campeón Mundial de los Pesos Pesados y Rhodes como actual Campeón de la WWE) para dirimir cual de ambos campeonatos, a priori al mismo nivel jerárquico dentro de los Títulos de la Empresa, se coloca a cierto nivel superior respecto al otro.

Las circunstancias en las que llega esta pelea son muy llamativas: hasta la fecha, Rollins no ha sido capaz de vencer a Rhodes jamás en pelea individual, habiendo protagonizado ambos tres choques de estas características hasta el momento. 

Con ese background, Rhodes llega al choque confiado y bastante seguro de si mismo, sabedor de que las estadísticas le sonríen ampliamente... mientras que del personaje de Seth Rollins no podemos decir lo mismo.

A su incapacidad para haber derrotado de forma individual a Cody jamás, a Seth Rollins se le unen, además, otras circunstancias personales alrededor del personaje que no vienen sino a incrementar aún más la sensación de cierta inseguridad que viene sintiendo Rollins de cara a esta complicada pelea que tiene en el horizonte.

No sin cierta razón, Rollins echa en cara a Cody que, en cierto momento de su trayectoria, ayudara a Cody a conquistar el Título de la WWE que Rhodes lograba quitarle de las manos a Roman Reigns, apoyándole Rollins en todo momento, peleando incluso en su esquina y sacrificando gran parte de su tiempo, de sus esfuerzos y de sus oportunidades, que podría haber empleado Seth en otros menesteres (y cuya motivación, recordemos, para Rollins venía de su eterna rivalidad con Roman Reigns desde la ruptura del stable The Shield, años atrás).

Rollins reprocha a Rhodes que, en gran medida, fue su "muleta" y su punto de apoyo en aquellos meses para que este lograra dicho Campeonato y que ahora, embarcado Rollins en otros objetivos, Rhodes prácticamente se haya olvidado de él y no se lo haya agradecido lo suficiente una vez capturaba dicho objetivo.

Por si todo esto fuera poco, y a las dudas lógicas que le suscita a Rollins el no haber logrado ganar jamás a Cody en combate individual, viene a añadirse su actual posición como lider de The Vision junto a Paul Heyman.

Si Rollins cae ante Rhodes por una cuarta vez, su liderazgo en dicho grupo podría resquebrajarse... y eso es, precisamente, lo que Paul Heyman le expresa en esta promo, una vez Rollins prácticamente "fuerza" a Heyman a que le diga la verdad de lo que siente, aunque pueda no gustarle oírla.

En definitiva, y con todo este cocktail de elementos, estos hombres lograron dejarnos una de las mejores promos de todo lo que llevamos de 2025. Esplendida a todos los niveles.

Personajes con motivaciones, personajes con los que te puedes involucrar emocionalmente porque logran hacerte sentir el por qué de sus acciones y actitudes, personajes que puedes sentir que te preocupan y que te importan sus destinos... El Wrestling son historias, amigos. El Wrestling necesita historias; el Wrestling sin historias queda reducido a la nada más absoluta (ya escribí una entrada en este mismo Blog al respecto).

Sin duda aprecio el esfuerzo de WWE por mejorar sus historias y su narrativa a largo plazo en las últimas semanas. 

Básicamente, y ya para terminar, por esto mismo pasan las décadas y WWE está donde está, mientras que otras empresas registran los peores ratings televisivos de su historia con sus últimos weeklys o venden tan solo 900 paupérrimas entradas en su primer show posterior a su PPV más importantes del año.

La razón es obvia: hay compañías que parecen haber olvidado que esta Industria va sobre contar historias.

LA NOCHE DE MAXINNE DUPRI

A Becky Lynch ya la conocemos todos y sobran las presentaciones: Una de las mejores luchadoras de la Industria en la actualidad, una de las principales pioneras en la reciente transición para convertir el Wrestling Femenino de lo que era hace 15 años a lo que actualmente es dentro de la WWE y uno de los personajes esenciales en los shows actuales de la Compañía dentro del panorama femenil.

Por otro lado, teníamos a Maxinne Dupri, una luchadora que esta más verde que un campo de lechugas recien cultivadas y cuya preparación como Wrestler aun sigue desarrollándose entre bambalinas, una luchadora a la que aun le queda MUCHO por continuar mejorando y cuyos aportes en los shows han sido hasta ahora, sobre todo, como acompañante/supporter y personaje secundario en las zonas mas bajas del roster, mientras continúa preparándose.

Cuando supimos que, en el último Raw, la aun novata y aun muy inexperta luchadora iba a tener un combate contra Becky Lynch (tras algunos escarceos y humillaciones que la irlandesa habia venido protagonizando respecto a la rookie en algunos Raw anteriores), todos pensamos, de manera inmediata, en una victoria fácil para Lynch o, incluso, en un fulminante squash de la irlandesa sobre Dupri, dada la gigantesca diferencia de status entre ambas luchadoras.

Pero en Wrestling nunca se sabe, y no fue eso lo que ocurrió esta noche.

Pasaban los minutos y no solo Dupri presentaba una resistencia a las agresiones de Lynch que sorprendió al respetable sino que, además, tuvo varias oportunidades de llevarse la victoria con algunos pins que la irlandesa pudo romper antes de que la pertinente cuenta de tres de la referee de la contienda llegara a su final.

Pero si; aun con todo, Dupri acababa llevándose el muy sorpresivo triunfo, por difícil que sea de creer... aunque no por cuenta de tres, sino una por cuenta de diez fuera del ring en la que caía Lynch tras "despistarse" mientras se dirigía a la audiencia, probablemente por el propio desconcierto que estaba experimentando la luchadora al no dar crédito a que una pelea que, en teoría, iba a ser fácil para ella, acabara complicandosele tanto.

A pesar del sorprendente resultado, no nos engañemos: Dupri sigue verde, muy verde; y su preparación como Wrestler Profesional esta lejos de concluir. De hecho, hubo imprecisiones y descoordinaciones con Lynch en la pelea entre ambas que dejaron en evidencia este hecho, y que son casi esperable dado su aun limitado nivel actual.

Sea como fuere, y sin restar mérito al sorprendente resultado, hubo algo, seguramente, aún más importante: en el transcurso de la lucha, Dupri fue capaz de hacer lo más díficil (especialmente para un talento de su inexperiencia y falta de status y de popularidad dentro del roster de la WWE): conectar con el público, lograr una reacción positiva legítima del mismo durante el combate y granjearse su apoyo tras lograr meterse a la gente en el bolsillo. Esto, sin duda alguna, fue un detalle más importante, llamativo y prometedor que la victoria en sí misma.

Hay que decirlo todo: la ayuda de Becky Lynch trabajando con ella como contrapunto heel en el combate fue impresionante, preparando el terreno de forma magistral para que Dupri pudiera lucirse adecuadamente y brillar como consiguió hacerlo. De haberle tocado trabajar con una peor wrestler o con una peor villana, sin duda Dupri no habría conseguido un impacto al mismo nivel como el que logró causar esta noche; las cosas, como son. Excelente trabajo de Becky en ese sentido (una vez más).

No sabemos si esto representa un push o una señal de confianza que la Empresa ha querido darle a la luchadora a modo de premio o algo así, a pesar de encontrarse su wrestling todavía a un nivel bastante verde y bajo... pero, de cualquier modo, Dupri tuvo este lunes en Raw, sin duda, la mejor noche de su, hasta ahora, todavía corta y verde trayectoria.

No sabemos si la carrera de Maxinne Dupri dentro del Wrestling Profesional llegará a algo importante en el futuro o si, por el contrario, será una más de esos muchos que se quedan por el camino persiguiendo esa meta pero, sea como fuere, lo que esta claro es que Dupri no olvidará jamás esta noche; logre esa meta o no.